No products
Personnel:
Carmen McRae (vcl, p), Herbie Mann (fl, ts), Tony Scott (cl, p), Mat Mathews (acc), Dick Katz, Billy Strayhorn (p), Mundell Lowe (g), Wendell Marshall, Percy Heath (b), Kenny Clarke, Osie Johnson (d)
Reference: FSRCD 477
Bar code: 8427328604772
THIS PRODUCT IS NOT AVAILABLE FOR SALE IN THE U.S.
These are the first recordings of one of the greatest jazz singers of all time: Carmen McRae. On these distinctive Stardust/Bethlehem and Decca sessions, Carmen found the right space, freedom and apt accompaniment for her beautiful singing. Relaxed and unpretentious, she impresses with the freshness and clarity of her sound, the lucidity of her diction, the instrumentalized flow and logic of her phrasing, and her fine beat. On a first rate set worth hearing over and over again, all the musicians involved perform with taste and skill in a textbook example of the art of jazz singing.
"Carmen McRae es una cantante (y pianista) que suele aparecer en segunda fila en el bestiario jazzístico, detrás de Ella, Billie y Sassy (y si el bestiario abarcase más allá de 1945, Mildred Bailey, supongo). En todo caso es una cantante con sustancia, discos interesantes como el que hizo con temas de Monk, y la capacidad de no defraudar nunca, al menos a estos oídos. Incluso metida en pastelones setenteros como el disco Im Coming Home Again sale más que airosa. En cuanto a su relevancia actual, cuando se habla de Amy Winehouse como cantante, no como laboratorio humano se cita mucho a la Holiday como influencia lejana. Esto huele mucho a la típica simplificación publicitaria, sistemáticamente engullida por la prensa generalista. Si la Winehouse recordaba a alguna vieja gloria, yo me inclinaría por la McRae en su etapa madura.
Las grabaciones que aquí se nos presentan, salvo por unas en estudio con la orquesta de Mercer Ellington (1946) y otras en directo con Charlie Parker en el Onyx, son las primeras de la cantante (para los interesados en minucias discográficas, aquí encontrarán todo lo que quieran saber). Como anécdota, el primer tercio del disco viene a ser el motivo de que la McRae ganase el premio de Down Beat a la mejor cantante nueva del año, algo que, como aclaran las ilustrativas anotaciones, tenía su importancia.
Lo único que se puede achacar a estas grabaciones es su puntito conservador. Probablemente sea injusto, porque al fin y al cabo se trataba el debut de una joven cantante y lógicamente, ni estaba formada del todo, ni habría sido sensato asumir grandes riesgos. Aparte, los dos sellos que publicaron originalmente estos discos, Bethlehem y Decca, no se distinguieron por asumir grandes riesgos. En la práctica esto se traduce en que la McRae canta con un vibrato más pronunciado que en el futuro, haciendo lecturas muy pegadas al original (como en Easy to Love), con paráfrasis muy leves, como ella misma admite en las anotaciones (aunque hace algo de scat en Yardbird Suite), argumentando que las ideas del compositor también deben oírse. Su dicción es perfecta y, en general, es tan impecable y preciosista que no acaba de hacer saltar las chispas que años después serían habituales.
Por otra parte, los músicos acompañantes, un plantel destacable por méritos propios, arropan perfectamente a la cantante, especialmente Dick Katz, que está exquisito, y Herbie Mann, que inició su larga carrera discográfica en estas grabaciones.
Mucha clase y elegancia, promesa de lo que estaba por venir."
Fernando Ortiz De Urbina -29 de Enero, 2014
www.tomajazz.com